Los sustratos para realizar esquejes permiten maximiza el éxito en la propagación. En este sentido, la propagación por esquejes es una técnica fundamental en la jardinería, tanto a nivel profesional como aficionado.
El éxito de este método depende en gran medida de la elección del sustrato o substrato, según lo denomine el fabricante. Si bien existen diversas técnicas de propagación (semillas, esporas, división de mata, cultivo in vitro), en este artículo nos centraremos en los esquejes, destacando la importancia del sustrato en el proceso de enraizamiento. Y en concreto para el sector de la bricojardinería y bricohuerto, dejando el mercado profesional para otro artículo.
El sustrato ideal para realizar esquejes es la base del éxito.
El sustrato no es simplemente un medio de soporte; influye decisivamente en el enraizamiento al proporcionar anclaje, retención de humedad, aireación y nutrientes iniciales.
Podemos afirmar que no existe un sustrato universal, ya que las necesidades varían según la especie y el tipo de esqueje (apical, intermodal, de hoja, leñoso, etc.).
Sustratos brico para realizar esquejes.
Las opciones comerciales para el aficionado avanzado a la hora de elegir un sustrato para realizar esquejes no siempre son fáciles. Aunque no abundan los sustratos específicos para esquejes en el mercado de bricojardinería, existen alternativas válidas:
Una de ellas es utilizar los sustratos para plantas de interior, que suelen ser turbosos y con buena retención de humedad, ideales como base.
Y otras, los sustratos para semilleros, que ofrecen una textura fina y equilibrada, favoreciendo el desarrollo radicular.
Cualquiera de los dos, se pueden emplear y mejorar, añadiéndoles materias primas como arena de río lavada, fibra de coco, etc. para ir ajustándolas a las necesidades específicas de cada tipo de planta a enraizar.
Por ejemplo:
- La arena de río lavada o arena de sílice, mejora el drenaje y la aireación, especialmente crucial para especies como cactus y suculentas (añadir un 40% aproximadamente). Para aromáticas como romero o tomillo, un 20-25% es suficiente.
- La perlita aumenta la porosidad y la aireación, previniendo el encharcamiento.
- La fibra de coco aporta aireación y estabilidad al sustrato resultante.
- Y la vermiculita retiene humedad y nutrientes, mejorando la disponibilidad para las raíces.
En la mayoría de los casos, el sustrato final debe llevar una ligera fertilización y su pH rondará entre los 5,5 y 6,5.
Venta de sustratos para esquejes.
Al contrario que sucede en la venta de sustratos profesionales para esquejes, en sacos de unos, 70, 80, 100 y 120 litros de capacidad, a nivel de aquellos destinados a la bricojardinería y bricohuerto se comercializan en sacos de menor capacidad, pudiéndose encontrar envases de unos, 75, 10, 20 y 50 litros de capacidad.
Estos, además de las tiendas online, se encuentran en la sección de sustratos y áridos de los centros de jardinería, grandes superficies, floristerías, agricentos y demás puntos de venta. Los canales de venta de sustratos profesionales para esquejes a nivel hobby son mucho mayores que para los profesionales.
Preparación de un sustrato casero de calidad profesional.
Si no se quiere recurrir a la compra de un sustrato prefabricado, siempre podemos optar por hacerlo nosotros mismo.
Para elaborar un sustrato casero optimizado, se recomienda la siguiente mezcla:
- 50% de turba rubia con pH neutralizado (6.5-7.0) que proporciona estructura y retención de humedad.
- 20% de arena de río lavada o arena de sílice de granulometría fina para mejorar el drenaje y la aireación. Es importante ajustar la proporción según las necesidades de la especie.
- 30% de perlita, que aumenta la porosidad y facilita el intercambio gaseoso.
- Y un abono de liberación lenta o un fertilizante líquido muy diluido, para aportar nutrientes esenciales en las primeras etapas de desarrollo. Es crucial no sobrefertilizar, ya que podría dañar las delicadas raíces.
Consideraciones especiales para sustratos de enraizado.
A continuación, proponemos una serie de consideraciones especiales vinculada a los sustratos de enraizado.
Sustratos para esquejes de bonsái.
El mundo del bonsái presenta una gran diversidad de especies con requerimientos específicos.
El sustrato debe adaptarse a las necesidades de cada especie, considerando si se trata de un Ficus benjamina (necesidades similares a una planta de interior) o un pino (sustrato más árido y suelto). Recordar que se venden sustratos para bonsáis, que se pueden mejorar para esquejar aportándoles materias primas como las mencionadas anteriormente.
Momento óptimo para el esquejado y tipo de esqueje.
La época del año influye en el éxito del enraizamiento. Además, el tipo de esqueje (tierno o leñoso) determina el sustrato más adecuado.
Los esquejes leñosos suelen enraizar mejor en sustratos más gruesos y con buen drenaje, mientras que los tiernos prefieren sustratos más finos y con mayor retención de humedad.
Recipientes y condiciones ambientales.
Los recipientes (bandejas de alvéolos, macetas, etc.) deben proporcionar un buen drenaje.
Es fundamental controlar las condiciones ambientales como la humedad, temperatura y luminosidad, adaptándolas a las necesidades de cada especie.
Para esquejes leñosos, se pueden utilizar cajoneras o incluso el terreno directamente, mejorando este último con la adición de un buen sustrato para plantas de interior.
Hormonas de enraizamiento y acodos.
El uso de hormonas de enraizamiento adecuadas a la especie siempre es recomendable para estimular el desarrollo radicular.
En la técnica de acodo, se utiliza un sustrato turboso que retenga bien la humedad, manteniéndolo húmedo hasta que se desarrollen las raíces.
Como vemos, es importante adaptar el sustrato a las necesidades de cada especie y tipo de esqueje, ya sea mediante el uso de productos comerciales o la preparación de mezclas caseras. Así se optimizará el enraizamiento y garantizará el desarrollo de nuevas plantas sanas y vigorosas.