Las macetas de plástico han supuesto toda una revolución en todos los campos del sector verde y por ende en la agricultura. En este artículo nos vamos a centrar en las macetas de plástico para cultivo.

Sin duda alguna, con la llegada del material plástico en sus diferentes variantes, aparecieron nuevos productos, y otros ya existentes, cambiaron de material en su fabricación a favor de este.

Breve historia de las macetas de plástico en España.

La producción de macetas de plástico para cultivo en España comenzó de forma testimonial a finales de la década de 1950, con la introducción del polietileno (PE).

Durante la siguiente década se produjo su expansión, siendo durante la década de 1970 su rápida expansión, reemplazando gradualmente a las macetas tradicionales de terracota y cerámica.

En la actualidad, las macetas de plástico son el tipo de maceta más utilizado en España, representando más del 80% del mercado global: profesional y particular.

Mecanización de llenado y plantación en macetas

Macetas de plástico para cultivo profesional.

Si en el mercado de la bricojardinería, el plástico ha supuesto una apertura de posibilidades en el mundo de las macetas, en el caso de las macetas de plástico para cultivo profesional, también ha supuesto una gran revolución y en todos los sentidos.

Uno de los avances más importantes se ha centrado en sus diseños técnicos, consiguiendo modelos que permitan una perfecta mecanización y drenaje óptimo, si bien el sustrato elegido siempre juega un papel importante en este caso. La mecanización permite la manipulación fácil en sus diferentes fases de cultivo, y el drenaje que la maceta no mantenga un exceso de agua, a la vez que controle el autopinzado radicular cuando estas intentan salir de ellas.

En el caso del drenaje, se han diseñado modelos específicos para el cultivo de determinadas especies, como por ejemplo el arándano. De igual forma, de estructura como, por ejemplo, macetas de rejilla para cultivos en fases de esquejado.

Seguidamente, también se ha y está cuidando su diseño estético, para que las plantas, una vez salen del vivero, estas macetas ayuden a su venta por su forma, color, etc. Hay cultivadores que utilizan el color acorde al de la floración para potenciar su estética y calidad ornamental final.

Las principales macetas de plástico para cultivo profesional se centran en macetas de inyección para cultivo y macetas termoconformadas. Estas últimas han sido las últimas en entrar en escena y, sin embargo, son actualmente las que copan la mayor cuota de mercado.

En el caso de las macetas termoconformadas, permiten fácilmente el serigrafiado e incluso su fabricación multicapa, permitiendo tener un color interno que proteja el sistema radicular de la luz solar, y por el exterior mostrar uno o diversos colores que realcen su aspecto forestal.

Materiales plásticos utilizados para fabricar macetas de plástico.

De forma general, se utilizan diferentes materiales plásticos para fabricar macetas de plástico según su uso y mercado de destino.

Uno de ellos es el polietileno (PE). Es el material más común, utilizado por su bajo costo, flexibilidad y resistencia a la intemperie.

El polipropileno (PP) es más ligero y rígido que el PE, con mayor resistencia a la deformación y a los rayos UV.

Respecto al poliestireno (PS) es menos utilizado que el PE y el PP, debido a su menor resistencia a la intemperie y fragilidad.

Y también están los materiales reciclados, que se están utilizando cada vez más, como el polietileno tereftalato (PET) reciclado, para reducir el impacto medioambiental.

Como se puede deducir de todo ello, una maceta de plástico para cultivo no se queda ahí como tal, sino que obedece un mundo que contempla factores como, por ejemplo, la mecanización, la especie cultivada e incluso el aspecto del binomio planta-maceta en el punto de venta.